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Vuélvete Underground presenta TOTAL STRESS

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Texto para el Blog de Paco Arteaga

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Reflexiones de una Máquina Invitada.


Dicen que los españoles tendemos a reagruparnos cual ovejas manchegas cuando estamos en tierra extraña. Desde luego es totalmente verdad. Aunque alguna vez se opte, sin éxito, por la desafectada pose anti-spanish-talking (muy en boga y si no que se lo pregunten a los porteros del Panorama Bar...), abominando de cualquier aspecto ibero a tu alrededor, lo cierto es que donde hay un español, hay más.


En mi caso no engaño a nadie, el desparpajo, la verborrea frenética, la locura, y esa mezcla entre picardía e inociencia, cuando voy a Berlín, sólo la encuentro en mi amiga "La Paka". Que aunque no es el paradigma del españolito medio, por sus venas no deja de correr sangre canaria, o sea española. Y queramos o no, hay ciertos rasgos que definen a la cultura/raza mediterranea y sus alrededores. La afectividad, la flexibilidad y la intensidad, son para mi mucho más importantes que la independencia, el pragmatismo y la templanza teutona.


Desde luego que no estoy hablando del "buen rollito" fascista y falso que predomina por estos foros (Madrid), más bien todo lo contrario. Por ejemplo, una sonrisa no es síntoma de afecto.


Desde luego con "La Paka" la diversión está garantizada, pero no asegurada. Esclusiva como ella sóla, nada acomodada y siempre sorpresiva, se ha convertido en una pieza clave en mis escapadas a Berlín. Pero dejemos atrás los halagos... "La Paka" como Berín, tiene cosas malas y una de ellas es no haber salido el último sábado que yo andaba por allí...


En contra de todo pronóstico la idea de una escapada a Berlín para desconectar se mantuvo, y de qué manera de jueves a lunes. El desenchufe fue total, el descanso también. Nada de desfases en garitos interminables, nada de dobletes desquiciantes, nada de bajón y prisas a la hora de coger el avión de vuelta. Todo un triunfo, si consideramos lo proclive que soy para liarme (o dejarme liar) en este fantástico escenario para el desbarre que es Berlín. ¿O fue un fracaso?


El azar y la actitud sosegada, actual, de mis amigos allí, me salvo de la diversión alocada y el desfase lumpen. Ron con mucho trabajo y en plan healthy, los Jeans Team descansando de sus inumerables conciertos y en modo family y "La Paka" en esos días del mes que todas tenemos. Así que vida cultural, comidas y bebidas abundantes, turismo (sano) clubbing, domingueo y poco más... A destacar: la expo de Ulrike Ottinger y el visionado de Madame X (uno de los principales motivos de mi viaje), los repasos con "La Paka", la expo del Glas Pavillon (www.glaspavillion.net), la borrachera con los Jeans Team en un club secreto, los paseos al sol con Ron, mercados callejeros incluidos, y el descubrir que Berlín no esta muerto, que sigue barato para nuestros castigados bolsillos y que la posibilidad de mudarme allí sigue abierta...

A olvidar: la bajada de las temperaturas, aunque hacía sol, era demasiado frio, la cena en casa de Ron, de no ser por Wolf no hubiera dicho ni una sola palabra, el plantón que me dió "La Paka" y el club GMF, que aunque ahora esté en un emplazamiento divino (piso 12 y 15 en Alexanderplatz) no había por sonde cogerlo... En la planta de arriba demasiados niños, en la planta de abajo demasiados adultos, ni un sólo resquicio donde una mente adolescente pudiese explayarse...



Conclusión.


Una vez más Berlín se torna como una contradicción para mi. A pesar de haber tenido varias veces la oportunidad de mudarme allí y disfrutar de las comodidades que esta grandísima urbe te ofrece, con trabajo y papeles (anda, si soy europeo) incluidos, amigos (no sólo españoles, no solo "La Paka"), una vez más vengo con la certeza de que no sería feliz allí. Desde luego por factores en contra básicos que todo el mundo puede deducir... la lengua y el clima. Pero por otros más profundos como son el miedo a la soledad y el miedo al aburrimiento. Si bien todos estamos sólos en este mundo, esa soledad se hace más llevadera en ambientes propicios en los que creer o de los que renegar... Un aislamiento forzado no me llevaría más que a la amargura. Y un ecosistema que produce indiferencia me resultaría frustrante... Pero a su vez Berlín sigue siendo un reducto para las utopías colectivas y personales, un emplazamiento muy especial donde todavía es posible crear tu propio mundo y no ser arrollado por ello. Así que quién sabe...


Jose Salas aka Josefina sin más.

MADRIZ (Otoño/Invierno 08/07)

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Algunas fotos de las fiestas Vuélvete Underground
hechas por Paul Cassidy en una articulo sobre la noche madrileña.
Pincha en la imagen para ampliar su tamaño.

Peluca Invitada (Collage regalo de Roberto)

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